dimarts, 15 de juny del 2010

Empezar de nuevo II

Título: Empezar de nuevo
Autora: Mari-chan (kaitovsheiji)
Género: Drama, Romance (Shounen-ai), Amistad...
Personajes: Hey!Say!BEST, puede que más adelante salgan también los 7
Pareja(s): principal: YabuHika (Yabu Kota & Yaotome Hikaru) [y las demás estan por ver]
Tipo: Capitulado
Capítulo: 2/?
Sumario: Hikaru y Yabu eran buenos amigos hasta que el primero cambió, se alejó de su mejor amigo y empezó a ignorarle. Ahora, después de seis años, han vuelto a juntarlos en la misma clase. ¿Volverán a hablarse? ¿Por qué Hikaru cambió de repente? ¿Se rendirá Yabu ante las negativas de este? y ¿Cuál es la razón por la que Inoo y Daiki están tan preocupados?

NA: Segundo capítulo...

NA2: Arumi, gracias por tu comentario... Y sí, es YabuHika ^^ Me alegro que te guste (por lo menos de momento) xD


La siguiente semana fue casi un suplicio, tenía que estar atento en clase de historia (la que más) o el profesor Matsuoka iba a castigarle, pero tener al otro delante de él y pensar en la sonrisa de burla que le había parecido ver en su cara le despistaban.

Para evitar ser castigado, aprendió a fingir atención, con la ayuda de su mejor amigo del momento, Takaki. Cuando el profesor le preguntaba, Yuya le indicaba con señales lo que le habían preguntado o intentaba distraer al profesor.

-Gracias, Yuuyan -le dijo el viernes (como cada día), después de clase de historia.

El otro sólo sonrió y le contestó:

-Por tu culpa tengo que escuchar en clase, con lo que me gusta a mí descansar…

-Ya sabes que no puedo hacer nada contra eso -le devolvió la sonrisa Yabu.

-No te preocupes… -respondió Takaki-. Pero tienes que estar atento en clase de latín, no aguanto a Chiba-sensei… ni ella a mí. Sería raro que le prestara atención.

-Tranquilo, allí puedo concentrarme -contestó Kota. “Él no está” pensó.

El resto del día pasó sin incidencias, excepto por una vez que el profesor le pilló pensando otra vez en Hikaru, cuando Yuya no pudo avisarle, porque tampoco había estado atento (demasiado ocupado escribiendo algo en su móvil), hasta la última hora.

El profesor de inglés se había vuelto (medio) loco y quería que se inventaran un concurso en inglés (claro) y lo planificaran en sólo una hora. Por culpa de un par de chicas de la clase (que no dejaban de hablar) hizo él mismo los grupos.

Yabu se sorprendió cuando, aún y sabiendo que no estaba bien de la cabeza, Mr.White juntó con él a Takaki, Hikaru, Inoo y Daiki, parecía no querer que trabajaran, poniendo los mejores amigos (dos a tres) en un solo equipo. Además, juntar a los que mejores notas sacaban con un par de despistados (él y Yuya) no le parecía la mejor estrategia del profesor a la hora de hacer que la clase funcionase.

Cuando Mr.White les dio las órdenes, cómo tenían que estructurar el trabajo, qué tenían que poner… y los otros tres empezaron a hablar en inglés sobre el tema, Yuya y él se miraron, sin saber qué decir ni hacer.

Al parecer, Dai-chan se dio cuenta de eso, por lo que les preguntó (en japonés) qué ideas tenían para el trabajo. Inoo se les unió, pero Hikaru permaneció callado.

Había pasado media hora y aún no tenían nada definido. Sabían el nombre que iban a ponerle al juego, pero las pruebas aún no las tenían claras.

Un cuarto de hora más tarde, ya habían encontrado las pruebas pero aún no habían pensado los juegos de penalización que, decidieron, serían el premio para el perdedor.

Faltaban cinco minutos para que terminara la clase, pero no tenían el trabajo terminado. Entonces el profesor les llamó la atención a todos:

-How are you doing? [¿Qué tal vais?] -les preguntó. Al ver la cara de sus alumnos añadió-, <>Don’t worry if you haven’t had the time to complete it [No os preocupéis si no habéis tenido tiempo para acabarlo] -sonrió-. It’s for the next Friday. But I want it finished and the questions written in a cardboard. Ok, then. You can pick up your things and go [Es para el viernes que viene. Pero lo quiero completamente acabado y con las preguntas escritas en una cartulina. OK, entonces. Podéis recoger y marcharos.] -añadió, ampliando la sonrisa.

Algunos de los alumnos quedaros tan indignados que fueron a protestar, pero sólo recibieron un “Si no, no iban a trabajar. Piénsenlo, es viernes y, además, última hora. Sinceramente, ¿quién tiene ganas de trabajar en esas condiciones?”

Inoo y Daiki, en cambio, se apresuraron a pedir el número de teléfono a Kota y Yuya, para poder quedar durante el fin de semana (o la semana siguiente) y acabar el trabajo. Hikaru recogió, se despidió, y se apresuró hacia su casa. Dai-chan tuvo que llamarle la atención dos veces a Kota antes de que este le diera su móvil, de tan distraído que estaba pensando en por qué Hikaru se había espabilado tanto en salir de clase.

De vuelta a casa, caminando junto a Yuya, Yabu no dejaba de dar vueltas a la salida de clase precipitada de Hikaru. Su mejor amigo tampoco le prestaba atención, concentrado en teclear algo en su teléfono, por lo que no se dio cuenta de que volvía a estar perdido en sus pensamientos hasta que Takaki se despidió de él antes de entrar en su casa.

Volviendo a caminar, Kota se preguntó si tan desagradable le resultaba su compañía a Hikaru. ¿Tanto que tenía que alejarse de él como fuera?


Hasta el viernes siguiente, Hikaru había estado soportando bien las clases. Regla: No te gires para nada, si lo ves vas a despistarte. Cuando al profesor White se le ocurrió trabajar en equipos, rezó para que no le pusiera con Kota, aunque, sabiendo como era su profesor, no le sorprendió que los juntara. Dio las gracias porque Inoo y Dai-chan iban a estar con él también.

Durante el rato que duró la clase, Hikaru no pudo concentrarse. Oír la voz del otro, que no había cambiado tanto desde la última vez que hablaron como amigos, le mareaba y hacía que, una vez más, todos los recuerdos de los momentos que creía olvidados le golpearan, desconcertándolo aún más.

Sabiendo que sus amigos se ocuparían de que el grupo marchara bien, se dejó llevar por las memorias y casi no participó en la conversación.

Cuando el timbre sonó, anunciando el fin de la clase, Hikaru se apresuró a recoger, sabiendo que su padre llegaba temprano aquél día, el viernes casi siempre tenía que correr.

Tenía que comprar algo antes de marcharse a casa, así que se despidió, recibiendo un par de cálidos “Hasta mañana” provenientes de sus mejores amigos y un “Adiós” del mejor amigo de Kota, éste no dijo nada.

Echó a andar, dirigiéndose hacia las tiendas que había al lado del instituto. Viendo eso, sus mejores amigos se sonrieron, sabían que aquél día era el cumpleaños de su madre, por lo que no les extrañó que Hikaru se espabilara para poder comprarle algo antes de que su padre llegaba a casa. Esperaban que no tardara más de la cuenta, por su propio bien. “Ojalá no llegue tarde” pensaron ambos.

Corrió todo lo que pudo, se había entretenido demasiado comprando el regalo para su madre, y los recuerdos de la última vez que llegó tarde a casa se le acumulaban en la cabeza, convirtiendo casi todos sus pensamientos en una pesadilla.

Por suerte, llegó cinco minutos antes de que lo hiciera su padre, con el tiempo justo para dejar sus cosas en su habitación y volver a bajar para darle el regalo a su madre, quien se puso muy contenta pero sólo sonrió y evitó decir nada, sabiendo que iba a gritar, cuando oyó el sonido de la puerta que se abría y cerraba. Su padre estaba en casa.

-Hola papá.

El hombre respondió con un gruñido. Parecía que no estaba de buen humor y eso disuadió a Hikaru de preguntarle si podría quedar con sus amigos el fin de semana para continuar el trabajo de inglés.

-¿Qué tal el día, cariño? -preguntó la madre del chico, sabiendo de antemano la respuesta. Era mejor hacer que se lo contara cuanto antes, si no, no sabían como podrían acabar.

El hombre empezó a quejarse de tal y cuál subordinado suyos que, al parecer, sólo querían quitarle el puesto, de que su jefe le tenía manía porque le salía todo bien, de que el que se suponía su aliado en la empresa sólo quería hacerle caer…

Paranoias” pensó Hikaru, no creía que hubiera muchos que pudieran hacerle frente a su padre, ni siquiera en su empresa.

El chico entró en la cocina, mientras su madre ayudaba a su padre a ponerse cómodo, y vigiló que nada se quemara, no quería que su padre se enfadase con su madre por culpa de la comida.

Cenaron y luego el chico se dirigió a su habitación, dejando a sus padres solos delante del televisor, donde el hombre miraba un partido.

Abrió los libros pero no se podía concentrar, pensó en que su profesor se había pasado poniéndolos en el mismo grupo. Puede que en América las cosas se hicieran de un modo distinto, pero juntar los que trabajaban con los que se pasaban la clase distraídos no era una de las características del sistema educativo japonés.

Viendo que no iba a poder repasar, se puso el pijama y se tumbó en la cama, pensando que el día siguiente ya tendría tiempo de estudiar.

2 comentaris:

  1. A mi también me da miedo el padre de Hikaru D:
    ne, si este es el capi 2 ¿Dónde puedo leer el capi 1? ¿dónde está publicaso?

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